Los refugios de Oulettes de Gaube y Baysellance son dos de los puntos más emblemáticos de los Pirineos franceses, situados en el corazón del macizo del Vignemale. Más allá de ser simples lugares de descanso para montañeros, estos refugios están cargados de historia, ofrecen rutas espectaculares y esconden secretos que pocos conocen. En este artículo, exploraremos su fascinante pasado, las rutas que puedes realizar desde ellos y algunos datos curiosos que te harán apreciarlos aún más.
Tabla de Contenido
La Historia de los Refugios: Testigos del Pirineísmo
Refugio de Oulettes de Gaube
El refugio de Oulettes de Gaube, situado a 2.151 metros de altitud, se encuentra en un lugar privilegiado, justo frente a la imponente cara norte del Vignemale, la montaña más alta de los Pirineos franceses (3.298 metros). Este refugio fue construido en 1962 por el Club Alpino Francés (CAF) para ofrecer un punto de apoyo a los montañeros que se aventuraban en esta zona. Su ubicación estratégica lo convierte en un mirador natural hacia el glaciar de Ossoue y las cumbres circundantes.
El nombre “Oulettes” proviene del término occitano que significa “pequeñas ollas” o “hondonadas”, en referencia a las depresiones naturales que forman el valle donde se encuentra el refugio. Este lugar ha sido un punto de encuentro para generaciones de montañeros y alpinistas que buscan conquistar el Vignemale o simplemente disfrutar de las vistas espectaculares.
Refugio de Baysellance
El refugio de Baysellance, a 2.651 metros, es el refugio guardado más alto de los Pirineos franceses. Fue inaugurado en 1899 y lleva el nombre de Henry Russell Bayssellance, un aristócrata irlandés-francés considerado uno de los pioneros del pirineísmo. Russell fue un apasionado del Vignemale y llegó a construir varias cuevas en la montaña para pasar noches en sus laderas. El refugio original fue renovado en 1933 y, posteriormente, en 2003, para adaptarse a las necesidades de los montañeros modernos.
Lo que pocos saben es que Baysellance no solo es un refugio, sino también un símbolo del espíritu aventurero de Russell, quien llegó a organizar banquetes en las cuevas del Vignemale para celebrar sus ascensiones. Este refugio sigue siendo un punto clave para quienes buscan explorar el glaciar de Ossoue o realizar la travesía del macizo.
Rutas desde Oulettes de Gaube y Baysellance
Ambos refugios son puntos de partida para algunas de las rutas más espectaculares de los Pirineos. Aquí te dejamos un resumen de las principales rutas que puedes realizar desde cada uno:
Desde Oulettes de Gaube
- Ascensión al Petit Vignemale (3.032 m):
- Dificultad: Moderada
- Duración: 4-5 horas ida y vuelta
- Descripción: Esta es una de las rutas más populares desde Oulettes de Gaube. El camino asciende por el puerto de los Mulos y ofrece vistas impresionantes del glaciar de Ossoue y la cara norte del Vignemale.
- Travesía al Refugio de Baysellance:
- Dificultad: Moderada
- Duración: 3-4 horas
- Descripción: Esta travesía conecta ambos refugios a través del puerto de los Mulos. Es una ruta ideal para quienes buscan explorar ambos refugios en un solo itinerario.
- Ruta al Lago de Gaube:
- Dificultad: Fácil
- Duración: 2-3 horas ida y vuelta
- Descripción: Aunque técnicamente no parte del refugio, el Lago de Gaube es una parada obligatoria en el camino hacia Oulettes. Este lago glaciar es uno de los más bellos de los Pirineos.
Desde Baysellance
- Ascensión al Vignemale (3.298 m):
- Dificultad: Alta (requiere experiencia en alpinismo)
- Duración: 6-8 horas ida y vuelta
- Descripción: La ruta clásica al Vignemale parte desde Baysellance y atraviesa el glaciar de Ossoue. Es una experiencia inolvidable para montañeros experimentados.
- Travesía al Valle de Gavarnie:
- Dificultad: Moderada
- Duración: 5-6 horas
- Descripción: Esta ruta desciende hacia el famoso circo de Gavarnie, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Es una travesía espectacular que combina paisajes de alta montaña con vistas al valle.
- Ruta al Glaciar de Ossoue:
- Dificultad: Moderada
- Duración: 3-4 horas ida y vuelta
- Descripción: Desde Baysellance, puedes explorar el glaciar de Ossoue, uno de los últimos glaciares activos de los Pirineos. Es una oportunidad única para observar de cerca este fenómeno natural.
Secretos y Datos Curiosos de los Refugios
- El Refugio de Baysellance y las Cuevas de Russell:
- Henry Russell no solo fue un pionero del pirineísmo, sino también un excéntrico. Construyó varias cuevas en el Vignemale, algunas de las cuales aún se pueden visitar. Estas cuevas fueron diseñadas para ofrecer refugio y comodidad en la montaña, y Russell incluso las alquilaba a otros montañeros.
- El Espejo de la Cara Norte del Vignemale:
- Desde Oulettes de Gaube, la vista de la cara norte del Vignemale es tan perfecta que muchos la llaman “el espejo de los Pirineos”. Este lugar es un paraíso para los fotógrafos de montaña.
- El Glaciar de Ossoue:
- Este glaciar, visible desde ambos refugios, es uno de los más grandes de los Pirineos. Sin embargo, está en retroceso debido al cambio climático. En los últimos 50 años, ha perdido más del 50% de su superficie.
- El Refugio de Baysellance en Invierno:
- Aunque el refugio está guardado solo en verano, cuenta con una sala de invierno abierta todo el año. Sin embargo, las condiciones en invierno son extremas, y solo los montañeros más experimentados se aventuran a utilizarlo.
- La Leyenda del Vignemale:
- Según una leyenda local, el Vignemale está habitado por un espíritu protector llamado “La Dama Blanca”. Se dice que aparece en las noches de luna llena para guiar a los montañeros perdidos.
Consejos para tu Visita Oulettes de Gaube y Baysellance
- Reserva con Antelación: Ambos refugios son muy populares, especialmente en verano. Asegúrate de reservar tu plaza con tiempo.
- Equipo Adecuado: Lleva ropa de abrigo, calzado de montaña, bastones y un saco sábana.
- Consulta el Tiempo: Las condiciones meteorológicas en alta montaña pueden cambiar rápidamente.
- Respeta el Entorno: Ambos refugios están en zonas protegidas. No dejes basura y respeta la flora y fauna local.
Conclusión
Los refugios de Oulettes de Gaube y Baysellance no son solo puntos de descanso, sino auténticos tesoros de los Pirineos. Su historia, las rutas que parten desde ellos y los secretos que esconden los convierten en destinos imprescindibles para cualquier amante de la montaña. Si estás planeando una aventura en el macizo del Vignemale, no dudes en incluir estos refugios en tu itinerario. Y si buscas una experiencia guiada y bien organizada, te invitamos a descubrir nuestro trekking por el Vignemale, donde podrás explorar estos lugares de la mano de expertos.
¿Estás listo para vivir la magia de los Pirineos? ¡La montaña te espera!