La ruta del cares es hoy por hoy una de las rutas más concurridas de toda Europa. Más de 300.000 personas la recorren cada año. Tiene dos puntos principales, Caín y Poncebos son las poblaciones desde donde arranca y finaliza esta ruta, que como tantas otras tiene su historia particular.
La Ruta del Cares se construye como una de esas obras mastodónticas que pretendió con éxito conducir las aguas desde Caín hasta Camarmeña, en Poncebos y a la par aprovechar el salto en desnivel para la producción de energía eléctrica.
Así se proyectó y así se hizo finalmente. Cientos de obreros dejaron su empeño en este inhóspito lugar en trazar y tallar en la propia piedra, a base de pico, pala y barrena, una obra plagada de túneles.
Esta Garganta Divina como se conoce al Desfiladero del Cares divide los macizos central y occidental del Parque Nacional de los Picos de Europa. En ella, en el año 1915 se comienzan las obras por donde llevar el agua desde Caín a Camarmeña a través de más de 70 túneles. Una obra titánica que suponía casi diez kilómetros de recorrido por encima del actual camino por el que hoy transitas los senderistas que hoy transitan estos parajes.
Cinco años de obras. En 1924 finaliza dicha canalización. Una obra civil de casi 10 kilómetros de los que más de la mitad son túneles.
En el año 1945 surge la necesidad de crear una ruta paralela a fin de mantener el canal y posibilitar la comunicación directamente entre las dos poblaciones.
¿Cuántos kilómetros tiene la ruta del Cares?
La Ruta del cares suponen 12 kilómetros de ida y otros tanto de vuelta. 24 kilómetros que unen los pueblos de Caín y Poncebos, para tomárselos con calma, contemplando estos parajes de una belleza especial. Muy recomendable tener presente que estamos en zonas de especial riesgo. Bien debido a la caída de piedras provocado por los animales que cruzan los pedreros superiores, bien debido al tipo de terreno por donde pasa, bien a los kilómetros de ruta, hay que prestar atención a la propia senda. Procurar llevar buen calzado para estos terrenos, un frontal nunca está de más y agua. Aunque en el camino hay alguna caída de agua de alguna riega lo mejor es llevar cada uno su propia hidratación.
¿Qué dificultad tiene la Ruta del Cares?
En la ruta del Cares es necesario apreciar una serie de cuestiones que hay que valorar y tener en cuenta. En primer lugar, se trata de una ruta de montaña, lo cual aconseja siempre estar provistos de material propio para realizar una ruta de estas características. O sea, agua, vestimenta adecuada y previsión de horarios. En segundo lugar, se trata de un recorrido con fuertes caídas o precipicios. Aconsejable respetar siempre las direcciones de camino. En tercer lugar, es una ruta que no admite vías de escape. Una vez se inicia la ruta, o se llega al punto de destino o se da media vuelta de regreso. Contar también, por lo tanto, con esos tiempos en caso de indisposición.
¿Cuánto se tarda hacer la Ruta del Cares ida y vuelta?
La ruta en una dirección nos puede llevar unas cuatro horas realizándola tranquilamente. Contemplando el paisaje, haciendo fotos y tomándose el necesario descanso.
Cómo realizar la ruta del Cares?
Lo ideal para no hacer un viaje de ida y vuelta por el mismo lugar es plantear esta ruta en una sola dirección. Bien partiendo desde Caín, bien haciéndolo desde Poncebos, una vez hayamos llegado a nuestro punto de llegada tenemos la posibilidad de coger alguno de los taxis disponibles para hacer el recorrido de regreso por carretera o la posibilidad de volver en el servicio que la empresa ALSA nos ofrece.